¿Qué es la Pausa Activa?
La pausa activa incluye una rutina de ejercicios de estiramientos de diferentes grupos musculares y movilidad articular, además de sugerencias posturales para promover hábitos saludables.
Se realiza en un breve espacio de tiempo en la jornada para activar la respiración, la circulación sanguínea, la energía corporal y prevenir lesiones denominadas micro-traumáticas (aquellas que aunque no se realicen esfuerzos importantes, la repetición reiterada del estímulo genera inflamación y dolor), ejemplos habituales pueden ser las tendinitis de los músculos que mueven la mano y el puño en personas que están mucho tiempo escribiendo.
La rutina implementada se orienta, principalmente, a la realización de ejercicios preventivos de lesiones osteomusculares y de fortalecimiento muscular, adecuados para el requerimiento de los participantes. Se trabajan las extremidades superiores e inferiores, la extensión, movilidad articular y estiramiento, entre otros. Además, se realizan actividades de corrección de malas posturas, de control de estrés y relajación.
De este modo, con la implementación de las Pausas Activas, se pretende amenizar las largas horas de estudio y de trabajo de la comunidad y lograr un óptimo rendimiento profesional. Se intenta potenciar el cuidado de la salud mediante ejercicios y estiramientos que les permitan tener un breve descanso para recuperar la energía que se ha perdido, a la vez que disminuir la fatiga y retomar el nivel de atención que, por la misma vorágine de la rutina, ha ido disminuyendo.
Beneficios de la actividad
La Pausa Activa favorece la postura de las personas, disminuye el estrés, mejora el desempeño laboral, estimula la circulación sanguínea y promueve la integración de quienes conforman la comunidad académica de la Facultad.