“La MTD es una herramienta basada en la realidad aumentada, con la lógica y el fundamento de la incorporación de elementos digitales, por lo que la interrelación con el mundo real, comienza a estar alimentada por esos recursos”, afirma Andrés Lo Vecchio.

“Este producto nació en el año 2016, por iniciativa de dos estudiantes: Carlos López y Ana Torrejón” –relata Lo Vecchio- “Ellos habían visitado el proyecto en Internet y necesitaban un espacio que incubara esta idea. El proyecto parecía muy lejano. Este laboratorio tiene muchos recursos vinculados con la Geotecnología. Y la iniciativa se nos planteó como un verdadero desafío, un motor para proyectarnos hacia el futuro. Así fue que después de arduo esfuerzo de todo un equipo (muchos elementos fueron construidos manualmente) y de la Facultad, con la adquisición de sensores fundamentales para el proyecto, logramos algo que ninguna universidad argentina pudo: tenemos la única MTD en un ámbito académico universitario y una de las pocas en el país. Existe una en el Servicio Geológico Minero en Buenos Aires. Es decir que estamos innovando en materia de herramientas aplicadas a la educación. Fuimos premiados por la UNCUYO en el año 2019, por liderar la innovación en las aulas”.

El proyecto materializó deseos y tareas pendientes en aquel momento, y sigue en constante evolución sin límites, ya que se alimenta del aporte creativo de todos/as los/as que lo integran, ya sea docentes o estudiantes avanzados, muy capacitados/as para hacerlo crecer cada día más. Tal es el caso de Octavio Zamorano y Luca Nozica, estudiantes de 4to. y 5to. Años de Geografía respectivamente (Ver aparte).

La MTD interactiva

Andrés Lo Vecchio explica que “en Geografía Física se aborda la Topografía y su modelado, que es el indicador de la ocurrencia de muchos procesos naturales y que condiciona frecuentemente el desarrollo de proyectos inmobiliarios o la ubicación de un grupo humano”.

“Hasta el año 2016 aprendíamos las nociones de Topografía con una carta topográfica, un modelo en dos dimensiones se expresa con curvas de nivel, líneas que unen puntos de igual elevación. Hay que desarrollar ese entrenamiento para darse cuenta o imaginar los accidentes topográficos a partir de esas líneas representadas en ese plano”.

“La MTD viene a revolucionar por completo esa manera difícil de entender la Topografía. Aquí, la persona se encuentra con un cajón de arena en el cual se pueden manipular los elementos topográficos, con la misma intuición que siempre se emplea al modelar con tierra o arena. Podemos, entonces, dentro de esa caja, modelar cualquier tipo de topografía, la que está siendo capturada por el primer sensor, el Kinect, que a través de un haz de energía infrarroja barre completamente la superficie y que conoce, segundo a segundo, la posición y distancia de cada grano de arena, respecto de ese sensor, que hay sobre la mesa. Esa información es transmitida a una computadora que la interpreta y clasifica los datos altimétricos en gradientes y les asigna un color. A las alturas más deprimidas, colores o tonos cercanos al celeste y las mayores elevaciones van hacia el rojo que tienden al blanco. Se genera el gradiente cual mapa físico escolar que se proyecta sobre la arena. Nos encontramos con la topografía que hemos generado, con un gradiente de color asignado, que se parece mucho a la realidad. Y esa información que percibimos en 3 D está siendo proyectada en una imagen en 2 D y se ve tal y como una carta topográfica. Automáticamente se hace ese vínculo entre topografía o formas y curvas de nivel”, precisa Lo Vecchio.

“La MTD supera a la carta topográfica, ya que esta es un recurso estático. Ese modelado construido se representa en una imagen automática: se mueve la arena, se modela otro rasgo y la computadora identifica estos cambios, asigna un nuevo gradiente de color, lo cual luego se traduce en la pantalla”.

Lo Vecchio agrega que “la herramienta ha evolucionado. Al comienzo solo se podía construir formas y se asignaban colores. Hoy, podemos simular inundaciones, crecidas, escenarios habituales para nosotros, como la problemática aluvional vinculada con nuestro piedemonte. Estamos trabajando para poder simular erupciones volcánicas y precipitaciones níveas, herramientas que hay que desarrollar más a futuro”.

Equipo de trabajo: Proactividad  y desafíos constantes

El geógrafo cuenta que formó parte del equipo que impulsó este proyecto: “acompañamos al Prof. Luis Lenzano en su momento, a la Prof. María Alejandrina Videla luego. Los tres éramos parte del equipo de cátedra cuando nuestros Ayudantes, Ana Torrejón y Carlos López presentaron la inquietud de la MTD”.

“Como equipo de trabajo, siempre nos hemos caracterizado por ser proactivos, con ganas de ir por más. Los estudiantes presentaron la iniciativa y los apoyamos. Nos gusta definirnos como los incubadores del proyecto de la MTD”.

“Mi tesis doctoral estuvo relacionada con estas herramientas, ya que me aboqué al estudio de la Geotecnología, trabajando con la dinámica de los glaciares, en Los Andes, mediante el uso de sensores remotos. Mi campo de aplicación es el uso de la tecnología para identificar cambios en la criósfera, que entiende generalmente sobre las precipitaciones sólidas, la nieve, el hielo marino, el hielo de lagos y ríos, los icebergs, los glaciares y plataformas de hielo. En mi caso particular, la ocurrencia de nieve o formación de glaciares sucedida en Los Andes en determinados lapsos temporales”.

“Hoy soy un miembro más del grupo que conforman personas que tienen un factor común: ganas de seguir aprendiendo y de responder a los distintos desafíos, buscando nuevos horizontes”.

El equipo del Laboratorio de Técnicas en Geografía Física está integrado por la Dra. María Alejandrina Videla, el Dr. Andrés Lo Vecchio Repetto, junto a un amplio grupo de egresados y estudiantes.

El proyecto de la MTD móvil

“Existe la propuesta de acercar la experiencia de la MTD a distintos ámbitos escolares. El espectro de público es amplio. Hemos recibido la visita de escuelas primarias, secundarias y estudiantes de carreras universitarias. Tenemos proyectado generar una versión gemela de la mesa, más pequeña, con ruedas. El traslado de esta herramienta permitirá dar a conocer nuestro trabajo en la carrera, reflejando los servicios que podemos prestar en cualquier evento y lugar, acercando la experiencia de la MTD a quienes tengan interés, pero no la posibilidad de llegar hasta la UNCUYO”, cuenta el geógrafo.

“Hemos desarrollado el conocimiento necesario para construir mesas topográficas y, desde este espacio, ofrecerlas a distintas instituciones públicas o privadas que las necesiten”, cierra Lo Vecchio.

El equipo del Laboratorio de Técnicas en Geografía Física está integrado por la Dra. María Alejandrina Videla, el Dr. Andrés Lo Vecchio Repetto, junto a un amplio grupo de egresados y estudiantes.