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“El lenguaje inclusivo es una puerta abierta a la reflexión sobre el lenguaje”

La afirmación pertenece a la Dra. Iris Viviana Bosio, compiladora del libro de reciente aparición "El género del lenguaje y el lenguaje del género. Inclusión, binarismo y sexismo en clave de escritura y edición", de Editorial EUDEBA, que reúne textos críticos de cuatro autoras y de un autor. En esta entrevista, Bosio, junto a dos de las investigadoras de la Facultad de Filosofía y Letras, expone aspectos referidos a esta publicación, que analiza la complejidad y la riqueza de la relación entre género y lenguaje.

29 de agosto de 2023, 12:49.

imagen "El lenguaje inclusivo es una puerta abierta a la reflexión sobre el lenguaje"

Mgtr. Adriana Zani y Dra. Iris Viviana Bosio, coautora y compiladora, respectivamente, del libro "El género del lenguaje y el lenguaje del género. Inclusión, binarismo y sexismo en clave de escritura y edición"

El género del lenguaje y el lenguaje del género. Inclusión, binarismo y sexismo en clave de escritura y edición expone diferentes posturas en relación con el tema del lenguaje inclusivo. Hay un capítulo referido al fenómeno y su uso en las instituciones (Carolina Sacerdote y Adriana Zani), vinculado al análisis textual y descriptivo de la problemática. En otro de los capítulos (José María Gil), se aborda la temática de las limitaciones del lenguaje inclusivo desde la perspectiva de la filosofía del lenguaje. El capítulo de Andrea Menegotto desarrolla la temática desde un enfoque gramatical. Finalmente, Mariana Podetti, especialista en ediciones y en la didáctica de la edición, abarca el fenómeno desde esa interesante perspectiva.

 

Iris Viviana Bosio es doctora, profesora y licenciada en Letras, y magíster en Lingüística aplicada por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina)

Cómo nació el libro

La Dra. Iris Viviana Bosio explicó cómo surgió la idea de compilar los diferentes capítulos críticos sobre el tema: “Directivos de EUDEBA, junto a los de la Editorial de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y la cátedra de Edición de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA me propusieron participar, como representante de Ediunc (Editorial de la UNCuyo), de la Comisión Organizadora de  las Jornadas de Edición Universitaria (JEU) que se realizaron en 2020, para las que propuse una Mesa sobre lenguaje inclusivo. Estábamos en plena pandemia y las jornadas habían sido organizadas con modalidad presencial desde el año anterior. Contacté a lingüistas, editoras y editores que trabajan en esta temática. La Mesa contó con mucho público que la siguió en vivo, a través del canal de YouTube, y que planteó múltiples inquietudes sobre el tema”.

“A partir de esa experiencia, desde la dirección de EUDEBA me propusieron la compilación de un libro sobre lenguaje inclusivo, dado el gran interés que había suscitado. Asumí, entonces, como un honor, el desafío de que la primera editorial universitaria argentina me confiara llevar adelante ese proyecto”.

EUDEBA decidió que la publicación integrara la colección “La vida y los libros”, especializada en edición, que cuenta con autores y autoras de la talla de José Luis de Diego, Ana Mosqueda y Fernando Esteves, por ejemplo. Convoqué al Dr. José María Gil de la Universidad de Mar del Plata (UNMdP) y a la docente y editora Mariana Podetti, de la Universidad de Buenos Aires (UBA), que habían participado de aquella Mesa de las JEU, para que escribieran dos capítulos. Las colecciones de una editorial deben cumplir con estándares de cantidad de páginas, temática, formato, etc., por lo que hubo que pensar en especialistas que pudieran sumarse. Así se incorporaron al proyecto la Dra. Andrea Menegotto, también de la UNMdP, una destacada lingüista que trabaja en gramática con perspectiva sociolingüística, como así también la Mag. Adriana Zani y la Esp. Carolina Sacerdote, integrantes del proyecto que dirijo de la Secretaría de Investigación, Internacionales y Posgrado (SIIP), en cuyo marco venían investigando problemáticas relacionadas con el lenguaje inclusivo. Todas ellas, de manera entusiasta, se comprometieron, entonces, con la escritura de los restantes capítulos del libro”.

El género y el lenguaje

Sobre el eje temático del libro, Viviana Bosio señaló: “Considero que la relación entre género y lenguaje no se define en términos de un conflicto, sino de una dinámica, porque el lenguaje es un producto social: la sociedad cambia y, por lo tanto, el lenguaje acompaña ese proceso, pues se nutre de lo social. Y no pocas veces, incluso, genera esas transformaciones, ya que la sociedad también se alimenta del lenguaje. Culturalmente, todo este movimiento social en torno a la perspectiva de género, que excede al lenguaje, necesariamente repercute en él. Y el libro se vincula con esta interacción lenguaje-sociedad y su relación con el género, a través de distintas perspectivas de acercamiento a este fenómeno”.

Respecto de los conceptos desarrollados en la obra, Viviana Bosio subrayó que “en todos los capítulos hay una sección dedicada a las nociones de sexismo, binarismo e inclusión, que no son categorías lingüísticas, sino de análisis social y cultural que impactan en el lenguaje. Así, entonces, hablaríamos de sexismo lingüístico, binarismo lingüístico e inclusión lingüística, o lenguaje inclusivo. Desde este lugar, como lingüistas, tratamos los temas en los que somos especialistas”.

“Para el estudio de la relación lenguaje-género, el primer paso es conocer el fenómeno, el lenguaje, la lengua española y sus posibilidades de expresión, antes de tomar una postura a favor o en contra del lenguaje inclusivo. Se ha llegado al extremo de afirmar, apocalípticamente, que se está aniquilando la lengua española. Es importante mirar el panorama completo. Lo que genera o plantea un conflicto en la vida no necesariamente se define como una limitación y, en este caso concreto, puede ser una puerta abierta a la creatividad lingüística para ampliar, incluir, incorporar. No hay necesidad de ponerse a favor o en contra de este fenómeno. Sí la hay de investigar, de instruirnos y de analizar sus posibilidades”.

Es importante que la UNCuyo sepa que cuenta con profesionales especialistas en esta temática para asesorar y trabajar en conjunto. Con las profesoras Zani y Sacerdote estamos comprometidas desde hace muchos años en un proyecto de investigación de la universidad, radicado en esta unidad académica. ¿Cómo no hacer extensión de nuestro proyecto en ese sentido? A nuestras casillas de correo llegan diariamente circulares, resoluciones, ordenanzas, en las que observamos voluntad de incorporar la perspectiva de género al lenguaje administrativo e institucional; pero la voluntad es el primer paso, luego hay que actuar lingüísticamente con corrección y coherencia. No se trata solo de escribir ‘director/a’, sino que es necesario atender a la concordancia: no podemos, por ejemplo, escribir ‘vamos a citar a un profesor/a’, ignorando la regla básica de la concordancia de género gramatical. Todo este conocimiento ayudaría a tener un discurso institucional inclusivo, coherente y que respete las reglas de la lengua. La problemática del lenguaje inclusivo es una verdadera puerta abierta a la reflexión sobre el lenguaje”.

Por otro lado, subrayó que “el cambio lingüístico no puede ser concebido sin el transcurso del tiempo. No sucede de la noche a la mañana, sino a lo largo de cientos de años. Una política lingüística puede, por ley, establecer el uso de determinadas formas de la lengua. Entonces, estaríamos obligados a exteriorizar el lenguaje de una manera determinada. Eso no significa que la tengamos interiorizada, que la hayamos aprehendido. Hay que pensar que para que se instalen en todos los  hablantes de una lengua esos cambios, o, como dice Andrea Menegotto en su capítulo, los hablantes pasen de la lengua ‘e’, que es la exteriorización lingüística, a la lengua ‘i’, su interiorización, hace falta mucho tiempo. Esto va acompañado de un análisis, una evaluación sociolingüística de lo que pasa: hay que ver si esos cambios quedan en una jerga, o en qué lugares geográficos o comunidades de habla se instalan efectivamente”.

El título del texto: un juego de interacción

Con relación al título del libro, Bosio indicó que “si bien parece un juego solo de palabras, en realidad no lo es. En él, se plantea la relación entre el lenguaje, el pensamiento y la cultura. Es un debate de muchos siglos el de la relación entre el lenguaje y el pensamiento: ¿hablamos como hablamos porque pensamos como pensamos? ¿o pensamos como pensamos porque hablamos como hablamos? Con los avances de la neurociencia y de la psicolingüística aplicada, queda claro que esto no puede seguir planteándose como una dicotomía, ya que existe una interacción constante entre el lenguaje y el pensamiento. El pensamiento tiene que ver con cómo vemos y entendemos el mundo, la cultura en la que estamos inmersos. Al hablar del género del lenguaje, hacemos alusión a que este tiene una conformación tal, que hace que podamos expresarnos en una lengua determinada mediante categorías de género. Nuestra lengua, el español, tiene género: gramaticalmente tiene el masculino y el femenino. Este es el género de la lengua española. En el título se juega con estos conceptos. Este género (el del lenguaje, el gramatical), asume otro valor si invertimos la expresión. Si hablamos del lenguaje del género, adquiere otra acepción, la de categoría sociocultural, relacionada con la problemática de la perspectiva de género, que está reclamando un lenguaje que le permita ser visibilizada. El título, entonces, juega con todas estas acepciones. La palabras ‘lenguaje’ y ‘genero’ se conjugan en un título que intenta reunir todos esos valores y significaciones”.

El lenguaje inclusivo en ámbitos institucionales

Adriana Zani, coautora de uno de los capítulos referidos a este tema (“Lenguaje inclusivo. Qué dicen nuestras instituciones”) afirmó que “nuestro trabajo de investigación se desarrolló en el marco del Programa Corpus EspaDA-UNCuyo (NdR: Corpus de Español en el Discurso Académico de la Universidad Nacional de Cuyo). Se trata de un proyecto SIIP, cuyo objetivo es la elaboración de un corpus lingüístico del discurso académico de circulación efectiva en la UNCuyo, en los ámbitos de docencia, investigación, administrativo e institucional. A partir de este corpus en formación, comenzamos a hacer un rastreo del uso institucional del lenguaje inclusivo”.

“En este contexto -continuó- merece destacarse la labor investigativa de Carolina Sacerdote, para realizar el hallazgo de textos de actas, resoluciones y otros géneros discursivos que dan cuenta de las necesidades de la sociedad respecto del uso del lenguaje con perspectiva de género. Consultamos también guías producidas en nuestro país por diferentes universidades e instituciones, como el Banco de la Nación Argentina, el Banco Central, Trenes Argentinos y el INTA. Nuestra labor fue descriptiva, no valorativa. Nos hemos limitado a hacer un rastreo de las guías y recomendaciones para el uso del lenguaje inclusivo, no sexista, incluyente, de género incluyente, según las diversas denominaciones que recibe esta forma particular de hablar. Nuestra UNCuyo no ha publicado una guía institucional de recomendaciones, aunque sí lo han hecho algunas unidades académicas, como la Facultad de Ciencias Políticas y la de Educación”.

“Por otra parte –añadió- el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) ha elaborado una recomendación, una guía a la que nuestra universidad puede adherir. El CONICET también tiene una para el uso del lenguaje inclusivo. Los y las lingüistas tenemos mucho que aportar a la reflexión para mejorar los modos de decir en general. He tenido la oportunidad de participar en eventos científicos tratando esta problemática. Entre 2017 y 2018, hubo un estallido con la aparición del fenómeno de ‘la marea verde’, que instaló el tema. A partir de 2018, realicé publicaciones rastreando las notas periodísticas que refirieran al lenguaje inclusivo”.

“Estudiando la lengua y la literatura surgió la cuestión de la  ‘duplicación’ o ‘desdoblamiento’, que consiste en la utilización conjunta del femenino y el masculino en el discurso. Uno de los argumentos que llamó mi atención dentro de la guía del CONICET, una de las de mejor elaboración, según mi criterio, establece que, en realidad, no hay una ‘duplicación’, en respuesta a aquellos lingüistas que están a favor de la economía del lenguaje y para quienes duplicar es antieconómico. Según esta guía, no estamos diciendo la misma cosa dos veces, sino que cuando decimos ‘señores y señoras’ nos estamos refiriendo a dos elementos de naturaleza diferente. Investigando la lengua española, leemos, en el Poema del Mío Cid, al comienzo, en uno de los versos: ‘Y saliéronlo a ver al Mío Cid vasallos y vasallas’. Es decir que podemos constatar, en este antiquísimo poema, un uso inclusivo del lenguaje: se nombra a mujeres y varones que reciben al Cid Campeador. No se trata de un uso antieconómico. Las mujeres son mujeres, los hombres, hombres y las otras identidades también lo son. El término ‘duplicar’, entonces, resulta sexista, porque se trata de identidades de género totalmente diferentes que tienen sus nombres y que deben ser incluidas en el discurso”.

El lenguaje es poder, tiene un valor político y estamos atravesados/as por él. Más allá de si estamos a favor o en contra del lenguaje inclusivo, se ha puesto sobre el tapete que somos lenguaje también y que la forma de utilizarlo expresa quiénes somos. La forma en que comprendemos la realidad está atravesada por el lenguaje. No es una cuestión menor el uso de la lengua, sino esencial en la vida humana y en la forma en que construimos la sociedad, una sociedad que hoy está sensibilizada en función de la lengua”.

 

“La defensa de un español más puro o no, instala lo importante que es la lengua para la sociedad. Los profesores y las profesoras de lengua somos guardianes y guardianas de la palabra, pero la lengua es de los y las hablantes”.

Usos del lenguaje inclusivo en la UNCuyo

Ante la consulta a cerca de la problemática que suscita el uso de este tipo de lenguaje en la UNCuyo, Carolina Sacerdote, coautora del mismo capítulo, nos explicó que “muchas veces hacemos del lenguaje inclusivo usos socio-retórico-discursivos que no tienen que ver en sí con el mensaje, sino con un posicionamiento. Evidentemente, cada vez que usamos una palabra, nos estamos posicionando. En el caso de nuestra universidad, tendríamos que dejar este aspecto de lado para tratar de lograr cierta objetividad, aunque estemos atravesados por situaciones políticas y partidarias”.

“En nuestro análisis, detectamos dos ejemplos que nos sirvieron, como contrapartida, para ver cómo el lenguaje inclusivo, en nuestra institución puntualmente, tiene que ser abordado y estudiado de manera completa por toda la universidad como unidad: uno de los casos fue el de una unidad académica donde las y los estudiantes debían seleccionar, en el juramento de su colación de grado, una fórmula femenina, en el caso de sexo femenino, o una fórmula masculina, en el caso inverso. Existió el ejemplo de una alumna de Ciencias Económicas que quiso recibir su diploma de Perito Partidor, pero la ley la obligaba que su título fuera de Perita Partidora. Esta estudiante debió recurrir al Consejo Directivo para que su título fuera expedido como ‘Contador Público y Perito Partidor’. Así, la ley, muchas veces, no deja decidir por sí a los/as propios/as estudiantes. Otro fuerte ejemplo, que sirvió de reflexión y análisis, tuvo lugar en noviembre de 2020, cuando una alumna de la Facultad de Artes y Diseño juró por la ‘Matria’, en lugar de por la ‘Patria’.

“Consideramos, en nuestro caso particular para el análisis, que, frente a estos hechos,  la universidad tiene que tener una postura clara que permita: 1) que el lenguaje pueda responder a los usos reales de la comunidad y 2) que exista un marco legal en virtud del cual sepamos cómo movernos al respecto. Por eso, son fundamentales las recomendaciones que, en nuestro caso particular, anhelaríamos que la universidad tuviera. Las guías que consultamos tenían una base lingüística muy interesante. La UNCuyo no ha publicado una. Nosotras desearíamos que se tuviera, para evitar futuros conflictos a la hora de emitir un título universitario o un juramento de título en un acto de colación, por ejemplo. Si investigamos cuándo se realizaron las últimas modificaciones a juramentos, estas datan de muchos años atrás. Entonces, estamos ante un tema muy importante y que nos toca de cerca a los argentinos, en una sociedad que está tan atravesada por varios conflictos que se podrán solucionar a través del diálogo. El lenguaje inclusivo no debe ser un conflicto más si se aborda a través de los diversos estudios de especialistas en el tema”.

“En la labor descriptiva que hemos realizado, hemos abordado estas guías desde la génesis, desde que se elabora una resolución hasta que se aprueba y se transforma en una guía de recomendaciones, para luego, una vez conocida, ser noticia periodística. Este proceso nos ayuda a entender cuán importante es este tema para la sociedad”.

Sacerdote agregó que “si bien hay otros problemas prioritarios a resolver, considero que es un desafío establecer una guía de recomendaciones para el uso de este tipo de lenguaje en la UNCuyo, investigando como lo hicimos nosotras, sin adoptar un posicionamiento, solo sobre la base lingüística, teniendo en cuenta todo lo que atraviesa al lenguaje, desde lo contextual, lo socio-retórico-discursivo, etc.”.

El lenguaje inclusivo, más allá de si uno/a está de acuerdo o no, lo use o no, es más que una moda pasajera. Es necesario detenerse a pensar que, si ha surgido este tema es porque es necesario que surja. Habría que abordarlo de una manera más consciente, razonable, interdisciplinaria. La arroba (@) o la equis (X) son impronunciables, habría que pensar por cuáles signos lingüísticos las reemplazaríamos, desde el ámbito de nuestra especialidad. La sociología arrojaría también su mirada sobre la problemática de género, por las vinculaciones referidas entre la perspectiva de género y la lingüística”.

“Me interesa detenerme en los fundamentos lingüísticos a los cuales se apela para justificar el uso de este tipo de lenguajes. Se trata de usos que invitan a replantearse el peso de las palabras, las que usamos muy livianamente. Si fuésemos más reflexivas/os en esas prácticas, tendríamos menos problemas. Hay un aspecto que no se está entendiendo: existen personas que `no se sienten parte’ o bien tratadas, por lo que han apelado a estos usos del lenguaje”.

 

“Personalmente desearía que fuéramos una sociedad más inclusiva y no me gustaría que el apelar a un lenguaje de estas características, que no refleje la profundidad de lo social, trajera como resultado un uso hipócrita más”.

 

“Para terminar, es importante subrayar que el lenguaje inclusivo no es un fenómeno netamente argentino. Se manifiesta en España, Francia, Suecia, Alemania. Es decir que en sociedades muy diferentes de la nuestra, se está reflexionando sobre estos usos o algunos otros que comienzan a hacerles ruido. El español de Argentina no está ajeno y no debemos tener fobia al cambio, sino estudiarlo, observarlo y analizarlo. Pero somos sociedades muy emocionales y tenemos muy arraigado el eje amor-odio. El lenguaje inclusivo plantea este dilema. Lo importante es ser cautos, objetivos y optimistas al respecto”, concluyó la investigadora.

imagen Prof. Esp. Carolina Sacerdote, coautora del texto.

Prof. Esp. Carolina Sacerdote, coautora del texto.

Información importante

En el marco de las próximas Jornadas de Estudios Lingüísticos (JELing 2023) que se realizarán en la FFyL, el panel que tendrá lugar el viernes 01 de septiembre, a las 12:30, en el aula C8, expondrá el tema del lenguaje inclusivo y las reflexiones en torno al libro de la editorial universitaria EUDEBA. Participarán las autoras Andrea Mengotto, Mariana Podetti, Adriana Zani y Carolina Sacerdote, y la compiladora, Iris Viviana Bosio.

Las III Jornadas Nacionales y II Internacionales de Estudios Lingüísticos (JELing), denominadas “Diálogos y dinámicas de una lengua en movimiento”, se desarrollarán los días 30 y 31 de agosto y 01 de septiembre de 2023, de 09:00 a 13:00 y de 15:00 a 19:00. Son organizadas por el Instituto de Lingüística Joan Corominas y la Secretaría de Extensión Universitaria de la Facultad.

 

 

Enlaces útiles

Para acceder a la info sobre las JELing 2023, hacé click en este enlace https://ffyl.uncuyo.edu.ar/la-ffyl-se-prepara-para-vivir
Para información sobre el proyecto de investigación Corpus EspaDA-UNCUYO mencionado en la nota, clickeá en  https://espada.uncu.edu.ar

 

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