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Marco Raúl Mejía Jiménez, presente en la FFyL

El referente colombiano de Educación Popular desarrolla un curso de posgrado en la UNCUYO, denominado "Educación Popular en América Latina", que incluye actividades en aula y en territorio. La propuesta tiene lugar los días 01, 02 (mañana y tarde), 03 (Jornada de Trabajo) y 10 de noviembre de 2023 (Encuentro de Cierre).

01 de noviembre de 2023, 11:30.

imagen Marco Raúl Mejía Jiménez, presente en la FFyL

Marco Raúl Mejía Jiménez

La formación tiene instancias áulicas (en FFyL y FCPyS), clases virtuales y dos instancias territoriales de trabajo. La primera en la Fundación Ecuménica de Cuyo y posteriormente en la Escuela Campesina de Agroecología – CEPFIC en Jocolí, Lavalle.

 

La actividad de Posgrado es organizada de manera interinstitucional entre la Secretaría de Posgrado, el área de Articulación Social de la Facultad de Filosofía y Letras y la Maestría de Estudios Latinoamericanos (MEL) de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. La iniciativa parte de un grupo de docentes, encabezados por María Rosa Goldar, con larga trayectoria en el tema y que están impulsando la formación sistemática sobre Educación Popular Latinoamericana.

 

María Rosa Goldar y el pensamiento comprometido

La docente e investigadora destacó la figura de Mejía Jiménez, quien ha profundizado la reflexión sobre educación popular, generando procesos de producción de saber y conocimientos en experiencias de educadores, en transformación educativa y en dinámicas de organización de grupos y movimientos sociales, quienes a partir de esta propuesta buscan producir un saber propio y de frontera para ganar en interlocución con el saber académico.

"Mejía Jiménez explicó sus saberes en numerosos libros, de los más variados y, con una una generosidad impresionante: los distribuye, los facilita y pone a disposición para que todos y todas puedan apropiarse de ellos. Su gran formación hace que tenga la posibilidad de pensar los escenarios, la educación, con un compromiso desde la educación popular, sin hacer un esencialismo desde alguno de estos lugares. Para pensar las ciencias sociales, humanas, para pensarnos nosotros como militantes de la educación, miramos hacia Marco Raúl, una persona que nos inspira mucho para reflexionar desde allí, sin encerrarnos en dogmas ni ortodoxias que traben la posibilidad de pensar creativa, lúcida y comprometidamente hacia adelante", dijo Goldar.

 

Marco Raúl Mejía Jiménez: educación popular y repúblicas

El educador se refirió a la obra de Paulo Freire y a la educación popular y su contribución al pensamiento pedagógico latinoamericano y a la pedagogía mundial. "Tratamos de caminar en el espacio en que confluyen el mundo académico universitario y el mundo de los movimientos sociales. Las educaciones populares, en esta perspectiva, tienen esa doble entrada. Una, viene de los procesos de los movimientos, de las luchas sociales. Otra, de un camino de consolidación conceptual. Nuestro referente es Freire, pero la educación popular desde hacía mucho tiempo estaba en el corazón de la disputa en el nacimiento de las repúblicas. Se trata de un debate muy profundo de tres troncos de repúblicas: las que buscaban un ser americano, en que encontramos a Simón Bolívar, los curas de México y también Paraguay. También estaban quienes querían nuevamente al rey. Brasil va a tener monarca desde 1822 a 1863. En México, la contraofensiva conservadora mata a los dirigentes de la revolución e intenta nombrar un emperador: Agustín de Iturbide. Y hay, en América, una línea que intenta sostener un modelo in res, fundado por el libre comercio y el individualismo. Allí se destaca Santander quien disputará con Bolívar a propósito de Simón Rodríguez. Flores en Ecuador y Sarmiento en Argentina son exponentes de esta vertiente, la que se refleja en la famosa frase sarmientina de que 'toda la civilización viene desde el Río de la Plata y la barbarie de La Pampa'. Andrés Bello será reconocido como el humanista que planteaba que no se podía impartir más educación que la necesaria a quienes debían ejercer ciertos oficios a los que estaban destinados". 

 

"En América, no se puede entender a las educaciones populares sin ese correlato de cuál es el proyecto de nación que se sostiene".

 

Mejía Jiménez recorrió el proyecto de Bolívar surgido de la Carta de Angostura, en la que afirmaba "es necesario darle ser a la educación popular". Después, hizo referencia a la educación popular nacida al amparo del síndrome de la izquierda de los años 60, para la que lo que hacía popular a la educación era su proyecto revolucionario: "era más popular quien más se acercaba a las vanguardias, a ciertas líneas políticas nacionales e internacionales. También narró su incursión en los movimientos campesinos colombianos, con formación de cuadros políticos, y cómo nació a necesidad de construir casas-escuela para los niños campesinos, en las que se prolongaba la experiencia del hogar. Comenzaron a formarse escuelas del movimiento indígena colombiano. El sindicato colombiano en 1982 encaró una reforma cultural que fueron la punta de lanza para enfrentar el plan estadounidense que trajeron los becarios de Tallahassee de La Florida. Nuestro conocimiento surgía de lo desarrollado en las prácticas, fundamentalmente. La escuela no era un lugar de transformación, sino de reproducción. En Colombia, educación popular se asoció a populismo. Se generaron muchos debates. Las reformas educativas propuestas desde EEUU para América Latina se encontraron con movimientos estudiantiles fuertes que resistieron. Las prácticas de los movimientos campesinos se conformaron como parte de esa resistencia. Estas experiencias fueron las que planeaban alternativas y un horizonte teórico enfrente. Eran escuelas de movimientos, de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos de Colombia, con una línea progresista". 

 

"Hoy, en el ámbito indígena de Cauca, tenemos 586 centros educativos, más de 5 mil maestros, una propuesta que es la del sistema integral de educación. Contamos con programas propios y autonomía financiera".

 

"Los proyectos se deben mantener, y ser esa gotita de agua que cae y cae -agregó. En alguna medida, ser educador o educadora es creer en las fisuras del sistema en las que debemos hacer caer la gotita de agua que caiga. Son luchas de resistencia y reexistencia. Resistencia al sistema y reexistencia en el sentido de que, a medida que va avanzando la línea de saberes propios, de sabidurías ancestrales, encontramos propuestas para las sociedades, abordando incluso sus problemas ambientales desde un entendimiento otro de la vida. Estamos frente a este proceso", explicó Mejía Jiménez.

 

"Las educaciones populares existen en todas las sociedades. Son una apuesta transformadora en el sentido freireano: La educación, por sí sola no cambia a las sociedades, pero sí cambia a las personas que van a transformar las sociedades". 

 

Para mayor información: cursosposgrado@ffyl.uncu.edu.ar / +54 261 4494168 o en la web, en el siguiente link Posgrado. Educación Popular en América Latina. Aportes para pensar la Educación pública en el contexto actual - Facultad de Filosofía y Letras (uncuyo.edu.ar)

 

 

 

 

 

imagen Marco Raúl Mejía Jiménez, entrevistado por Señal U

Marco Raúl Mejía Jiménez, entrevistado por Señal U

imagen Cronograma de Actividades

Cronograma de Actividades

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