Todo inicio de ciclo en la vida es una confirmación de la vida misma. Ser participante activo en ese proceso es estar convencido que se es parte de un todo que nos da razón de ser y de existir.
Como miembro de una sociedad, trascendemos en ella, en la medida de nuestra entrega en pos del otro. Y, a través de esa entrega que nace de nuestra vocación, nos encontrarnos con el prójimo y en ese acto nos realizamos en cuanto hombres.
El inicio de un nuevo ciclo en la vida universitaria es un llamado a continuar el camino que aceptamos recorrer como razón y principio de vida. Más allá de los sinsabores y de los obstáculos que tientan a las vacilaciones, caminamos a pie firme en la senda elegida.
Un nuevo ciclo académico se abre ante nosotros. Es un tiempo de compromiso, de esperanza, de entrega. Es momento de alegría espiritual porque llegan a nosotros nuevos jóvenes ávidos de conocimientos, de formarse, de descubrirse a sí mismos, dispuestos a entregarse en la continuación de la obra trascendente. Ellos son los eslabones de futuros ciclos.
Porque en tamaña empresa nadie es más ni menos importante por el rol circunstancial que le toque desempeñar. Todos somos partes necesarias. De allí que el arte de educar en el docente es saber. Estar dispuesto a entender los cambios como también a no aceptar los cambios por apariencias por el solo cambio.
Y en este nuevo ciclo de la vida académica universitaria de nuestra Facultad, queremos renovar un compromiso substancial en la gestión de gobierno.
Compartimos con mucha alegría, haber podido concretar logros, obtener cambios sustanciales, mejoras físicas que acompañan el crecimiento académico e institucional. Podemos enumerar rápidamente, la construcción del Primer Piso con un sector de novedosas aulas, el espacio abierto y común de la Plaza, la obtención de un nuevo Minibus, rampa de accesibilidad al edificio, cableado con sistema led que moderniza la institución, un nuevo espacio de Librería, entre otras cosas.
Hemos hecho un importante camino, acompañando a los tiempos que vienen en materia de actualización e innovación curricular. Significativo proceso que decantó en: 19 nuevos Planes de Estudios, la licenciatura en Turismo, en Arqueología, el Ciclo General de Conocimientos Básicos (Letras, Francés, Inglés, Portugués), las Diplomaturas, el Doctorado en Lingüística, la Categorización de Filosofía, Letras e Historia, los Ciclos de Profesorado (Mendoza y San Rafael) y de Licenciatura (gratuita). Celebramos el esfuerzo mancomunado del área de virtualidad que lleva a la fecha, 350 cátedras virtuales, los 38 nuevos egresados por el Plan Progresa, la nueva Estructura Orgánica funcional Administrativa y la reactivación de la Carrera administrativa.
Gobernar es el arte de dirigir con la participación y colaboración de toda la comunidad, de todos los claustros. Porque Filosofía y Letras somos todos. Pero es primordial que cada uno encuentre el lugar en el cual se sienta en plenitud consigo mismo, y desde él se disponga a ser parte del desarrollo pleno de la Institución.
La función del gobernante es la de conocer las necesidades de la gente y procurar dar respuestas con equilibrio y equidad. Escuchar, comprender, conciliar, integrar son acciones necesarias del buen gobierno. Es la actitud de servicio a favor de la comunidad en su conjunto y de cada miembro en particular. De allí que su grandeza nace, ante todo, de tener una finalidad situada más allá de sí mismo.
Es entonces que, en este nuevo ciclo académico, quiero renovar ante ustedes la voluntad de entrega y de servicio como compromiso personal y de todos quienes me acompañan en la conducción de nuestra Facultad de Filosofía y Letras.