Arqueología, la influencia y trascendencia de quienes somos
Al fundarse la Universidad Nacional de Cuyo, ya en su Acta Fundacional, se establece la creación de la Facultad de Filosofía y Letras, que, según se manifiesta, estaría compuesta por el área de Historia, Filosofía, Letras, la biblioteca, Lenguas Vivas y los institutos que ya existían en ese momento en Mendoza. A partir de ese momento, surge, en la Facultad de Filosofía y Letras, el Instituto de Etnografía. Desde ese momento, este Instituto empieza a concentrar los estudios de la materia. En 1945, el Instituto cambia de denominación por Instituto de Etnografía Americana e, inmediatamente después, se lo denomina Instituto de Etnología Americana. Realiza tareas de investigación, publicaciones y, en 1958, este Instituto toma la denominación de Instituto de Arqueología y Etnología, denominación que, hasta la actualidad, sostiene.
El Instituto de Arqueología de la Facultad de Filosofía y Letras fue un instituto que, desde el primer momento, se volcó a la investigación práctica en el trabajo fundamentalmente arqueológico, de Arqueología Prehistórica. Bajo la dirección de Salvador Canals Frau, un español que había llegado a Mendoza convocado por el rector de la Universidad, Edmundo Correa, quien se iba a transformar en el verdadero hacedor o generador de esta área de la investigación en nuestra facultad. Además de Salvador Canals Frau, hemos tenido un sinnúmero de investigadores de primer nivel. Valga la mención de arqueólogos como Castañeda, Juan Schobinger, el doctor Lagligia, el profesor Pablo Sacchero, el doctor Roberto Bárcena, las profesoras Lube Roitman y María Mulle; la profesora Ketty Böhm de Saurina. Luego camadas más jóvenes, como los arqueólogos Alejandro García, Víctor Durán , Clara Abal, María del Rosario Prieto, Jorge Garcia, un sinnúmero de investigadores que han hecho relevamiento a lo largo y ancho de la provincia en sus trabajos arqueológicos.
Es importante destacar que este Instituto, ya en sus orígenes, genera la revista denominada “Anales del Instituto de Etnografía Americana”, que surge en noviembre de 1940. Es decir, escasamente a un poco más de un año de creada la Universidad y la Facultad de Filosofía, surge la primera revista científica de la Universidad Nacional de Cuyo. “Anales” es una revista que hoy ha cumplido sus 81 años en la Facultad de Filosofía y Letras y es un espacio de difusión a nivel nacional e internacional, catalogada como una revista científica de primer nivel.
También, nuestro Instituto genera, a partir de 1960, el Museo de Arqueología y Etnología, museo que hoy, en la Facultad, sigue prestando servicios, que está abierto al público y que, fundamentalmente, es un lugar en donde los alumnos encuentran la posibilidad de la realización de clases prácticas. A su vez, cabe destacar, que este Museo tiene entre sus joyas arqueológicas -entre las muchas joyas arqueológicas que posee- el ajuar de la Momia del Cerro Aconcagua, la momia de origen incaica.
A partir de este Instituto, o del antiguo Instituto de Etnografía Americana, luego Instituto de Arqueología y Etnología, se va produciendo, en la Facultad de Filosofía, un espacio que requiere la formación, puntualmente, de arqueólogos. Cuando, en 1939, surge la Facultad de Filosofía, la carrera de Historia junto con Letras y Filosofía son carreras de profesorado; los institutos están dedicados a la investigación, estas tres carreras a la formación docente. Con el tiempo, la carrera del profesorado de Historia y Geografía, va captando a los jóvenes interesados en los estudios arqueológicos y todos aquellos interesados en la Arqueología, cursan la carrera de Historia y, luego de recibidos como licenciados o profesores de la misma, continúan sus estudios y los profundizan para alcanzar, definitivamente, la instancia de poder dedicarse a la Arqueología. Esta realidad nos fue haciendo entrever la necesidad de ir generando o pensando en una carrera propia de Arqueología.
Es muy importante destacar que nuestros arqueólogos, egresados de la Facultad de Filosofía y Letras como licenciados en Historia y luego especializados en Arqueología y doctorados en Arqueología, fueron generando escuela y fueron ubicándose a nivel nacional en lugares de privilegio como investigadores. Su influencia, no solamente quedó en el hacer local, sino que estos fueron generando trabajos y participando de investigaciones a nivel nacional, regional y hasta internacional. En este caso, cabe destacar los estudios realizados por nuestros investigadores en referencia al Camino del Inca y los trabajos realizados o convocados por universidades de Bolivia para realizar estudios de relevamiento.
Este caminar académico de nuestros arqueólogos fue generando, particularmente y paulatinamente, la necesidad de entrever la posibilidad de crear una carrera que contuviera, específicamente, a Arqueología -y no que el licenciado en Historia tuviera una variante, que era la Arqueología, para poder hacer su tesis en un tema de Arqueología y, como licenciado en Historia, luego dedicarse a la Arqueología como tal-. En este sentido, viendo la instancia académica que representó la conformación de nuevos planes de estudio, a partir del año 2015, la Facultad entró en un proceso de innovación y de generación de nuevos planes de estudio; una de las innovaciones que nos propusimos, fue la generación y la creación de la carrera de la Licenciatura en Arqueología. En 2018, se creó la carrera y, a partir de entonces, hemos venido teniendo un número muy importante de estudiantes en nuestra carrera.
Finalmente, a principios de este año, en el mes de marzo, en la primera reunión del Consejo Directivo de nuestra Facultad, se creó el Departamento de Arqueología, que acompaña al Instituto como parte académica formadora o preocupada en la formación académica de nuestros estudiantes y de nuestros futuros profesionales. En tanto que el Instituto de Arqueología sigue cumpliendo su rol no solamente en la investigación, sino también en el cuidado y el control del Museo de nuestra facultad. El doctor Pablo Cahiza es el director del Departamento de Arqueología, en tanto que el doctor Horacio Chiavazza es en director actual de Instituto de Arqueología y Etnología y, a su vez también, director de la revista “Anales de Arqueología y Etnología”, que se encuentra en plena contemporaneidad.