En esta ocasión, la conductora del espacio Ronda Lectora Literatura en Voz Alta, Lic. Ariana Gómez, inicia la lectura de la segunda parte del relato titulado “Monólogo”.
Si bien en la actualidad la libertad de la mujer es una opción que, básicamente, está en sus propias manos, generalmente sigue optando por la vida conyugal, al estar demasiado arraigado, en la sociedad, el concepto de familia. Es este punto el que se abordará al analizar los relatos de “La Mujer Rota”, de Simone de Beauvoir, libro que no fue muy bien acogido por la crítica y que, sin embargo, vendió 50.000 ejemplares en su primera edición. A pesar de haber sido catalogada casi como una novela rosa, la autora tiene claro cuál es su objetivo: comunicar. El destino de tres mujeres, el que ellas mismas han forjado, su sacrificio en aras del matrimonio y los hijos, se convierte en una carga de la cual sólo ellas pueden liberarse; y significan, para la autora y sus seguidores, una situación digna de analizar, intentando ver más allá de la simpleza de las historias y comprender el trasfondo de estas.
La razón por la que la mujer no puede desprenderse del todo de la carga a la cual está condenado su “género”, a pesar de haber logrado en gran medida su emancipación, corresponde a situaciones que han significado un lastre para ella a lo largo de la historia. Por ende, se propone analizar el problema a través de varias perspectivas: la sociológica, la psicoanalista y la existencialista. (López Morales, Berta del C. Contreras Fernández, Patricia, 2010)
Debido a la singularidad de su escritura, este “Monólogo” ha suscitado mucho interés crítico desde varias perspectivas. Compartimos, a continuación, un breve aporte desde el aparato crítico de Roland Barthes, que pueda contribuir a comprender todos los sentidos superpuestos a través de la estructura:
“Odio a la humanidad debido al abuso de su familia durante su vida. Este núcleo hace referencia al desprecio que siente Murielle para las personas. Su infancia fue llena de abusos psicológicos como sexuales. Los eventos festivos no le agradan y desea estar sola siempre. Se inicia la historia relatando un matrimonio fallido con Albert debido a que su madre le vendió, su matrimonio no fue por amor. ¡Asquerosos! Me cabalgan por la cabeza los veo los oigo. Se ceban de foie-gras podrido y pavo quemado y se relamen Albert y la señora Nanard Etiennette sus mocosos mi madre; es contra natura que mi propio hermano mi propia madre prefieran a mi ex marido. Todos ellos me importan un bledo únicamente que no me impidan dormir; una se vuelve apta para la jaula confiesa todo lo verdadero y lo falso que con eso no cuenten tengo una fuerte naturaleza no podrán conmigo. (De Beauvoir, 1968, p. 48) No soporta la soledad. Todos los eventos hasta este momento cuentan con la intervención de otros personajes secundarios. Debido a los atropellos recibidos durante su vida y con un segundo matrimonio fallido, Murielle empieza a tener problemas psicológicos. Por tanto, llega un punto que ya no soporta su soledad lo que provoca en ella la idea de que Tristan, su segundo exmarido, regrese a su vida, pero él no concuerda con su petición”.
En este 8vo. Episodio, nos dejamos llevar por la singularidad y la emocionalidad a borbotones, nos parece estar dentro de un melodrama, en un exquisito despliegue del género.
“La mujer rota”, una aventura intensa, a la que estamos invitados/as a participar de manera activa en #siempreliteratura, a través del canal de YouTube de la FFyL de la UNCuyo:
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