En la entrega 17º éramos testigos del tono épico de la novela en la voz de la niña narradora. El “oráculo” sobre la muerte de Mario, que predisponía la atmósfera trágica del relato, amenazaba con propinar una herida de muerte, una lesión social a la clase dominante.
Ya en la entrega 18º se van acumulando los sucesos que ratifican esa dirección: el vértigo de las descripciones, la aceleración del ritmo de la ficción cargan de sombras esotéricas y religiosas el ánimo del que lee y escucha el relato. Sugestión e intuición dictan el sino literario y diegético, rebelándose ante cualquier planteo racional: ámbitos funestos, reclinatorios, velas, crisis íntima de representantes del Clero pintan con planos de detalle las máscaras sociales, las violencias simbólicas, el patriarcado y sus mandatos, el poder de la Iglesia.
En los capítulos 9 y 10 de “Balún Canán”, se van revelando lo matices de los poderes hegemónicos sociales y culturales de raza, clase, género, religión e ideología; y se despliega la galería de personajes que se instauran como guardianes defensores del Clero frente al Gobierno y los indígenas.
En los escenarios de estos capítulos se va delineando el clímax novelesco. En ese contexto de negación del sincretismo, de defensa de la verdad única, de impotencia e incomprensión hacia lo diferente, Zoraida ruega que no le arrebaten a su hijo varón.
Al mismo tiempo, surca el relato la atmósfera poética que describe las sensaciones de las frescas nostalgias infantiles de la niña narradora junto a su hermano Mario: los miedos ante la amenaza de un infierno que se percibe lejano, la inocencia de fusionar lo negro con el peligro y el pecado (enredaderas nocturnas con formas caprichosas y terribles, pájaros silenciados) y de asociar la luz con la salvación y la seguridad.
Rosario Castellanos desmantela, de manera aguda y descarnada, los artificios del sistema articulado para dominarnos: la utopía del progreso y el miedo como recurso religioso para imponerse a los espíritus débiles y acríticos.
Esta entrega nos ofrece pasajes inquietantes, plagados de dramatismo, como la lucha interior de aceptación de la fatalidad por parte de Zoraida, y de redescubrimiento de una novela polifónica que se desliza de lo lírico y poético al realismo; de lo mágico a lo histórico y real, donde una niña es testigo de una etapa de profundas transformaciones históricas.
Ariana Gómez, atenta a las múltiples voces, renvíos alusivos y referencias culturales del texto, nos propone complementar su lectura con el aporte crítico del video de la Dra. Gabriela Cano sobre Rosario Castellanos, denominado "La lúcida rebeldía feminista de Rosario Castellanos, a 40 años de su fallecimiento", disponible en
https://www.youtube.com/watchv=FlxqlJLGTeo&ab_channel=ElColegiodeM%C3%A9xicoA.C.
¡No te pierdas la 18º Entrega de la lectura de “Balún Canán”, una de las novelas más significativas de las letras mexicanas! Un relato de historia, poesía y agudeza crítica que desarticula, con cruda ironía, la lógica de la subsistencia de los sistemas de dominación social imperantes.
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Fuentes:
Gómez, Ariana: Lectura 18º de “Balún Canán”.
Crespo, Omar Armando Paredes. “Congruencia histórica, poética y crítica en Balún Canán, de Rosario Castellanos. Estudio y acercamientos para una relectura”. Universidad Autónoma Metropolitana-Azcapotzalco, México.