Las Jornadas de Investigadores Jóvenes se realizaron los días 17 y 18 de abril en la Facultad de Filosofía y Letras (FFYL) de la UNCUYO. Fue organizado por los referentes del Instituto de Literaturas Modernas Claudio Maíz, director del Instituto, Elena Calderón y Lorena Gauna. Este foro procuró ofrecer, a quienes transitan sus primeros pasos en la carrera de investigación, una instancia de reunión con sus pares, y tuvo gran participación de los estudiantes.

Las reuniones científicas son necesarias para quienes incursionan en la carrera de Investigador, más allá de la disciplina que se elija como recorte de estudio. Estos encuentros de intelectuales se constituyen como focos del saber académico porque dan lugar a la difusión de los trabajos.

En este momento de la investigación, cada profesional presenta el tema que le concierne en su investigación y se predispone a recibir comentarios al respecto. Además, ofrece su producción al diálogo con los trabajos contemporáneos, lo que constituye de cierta manera una espacialidad del conocimiento. La comunicación interdisciplinaria y la variedad de temas sobre los cuales se pueden realizar trabajos permiten que los asistentes se vean enriquecidos con el aumento de su espectro de conocimiento.

Las jornadas desarrolladas en la FFYL consistieron en dos instancias de intercambio-formación. La primera fue un seminario taller, dictado por el epistemólogo Juan Manuel Torres, llamado “Estrategias para elaborar artículos para revistas cientificas internacionales”, en el que se expuso la significación actual de los principales términos del lenguaje científico. Contó con un interesante número de asistentes, que permitió a estudiantes de diferentes áreas de las humanidades intercambiar sus experiencias y dudas al momento de abordar la redacción de textos académicos.

La segunda instancia, como actividad central, fue el “Foro para investigadores jóvenes”. Los expositores dieron a conocer los trabajos que están realizando en la actualidad. La pluralidad de voces distinguió al encuentro de otras reuniones científicas.

Los temas que se presentaron abarcaron diversas áreas: desde la reivindicación del lenguaje desarticulado del siglo XX en la novelística chilena y la relación entre estética y política hasta la complejidad de trabajar con autores de siglos anteriores cuyos manuscritos no han sido transcriptos por la industria editorial. Con el paso de cada coloquio, se pudo dimensionar la divergencia entre los intereses de los trabajos, los saltos temporales, los estilos literarios o gnoseológicos.

Gracias a la dinámica de la pluralidad y la síntesis, se consiguió interesar a los asistentes para sumarse a debatir, preguntar y hasta cuestionar las exposiciones. Otra de las características del encuentro fue la convivencia entre profesionales que preparan sus tesis doctorales o del Conicet y estudiantes que participan de proyectos de investigación.